sábado, mayo 01, 2010

La persistencia de la memoria

No me acuerdo de cuándo fue la última vez que recité ante la cámara de CSTV Cádiz los 20" (sí, veinte segundos) de la previsión y el pronóstico meteorológico del día; por lo menos, tres años. Sin embargo, el recuerdo de tan alimenticio menester me persigue. Grabado a fuego en la memoria de veteranas telespectadoras, reaparezco en los sitios más improbables como "el que da el tiempo en la tele". Mi panadero me sigue preguntando cada día cuándo va a llover, o a terminar el levante, o a venir el calorcito... Naturalmente, le sigo informando con la admirable precisión de un reloj blando de Dalí.



Bueno, ¿y a qué viene esto? Pues nada: sólo que me ha dado vértigo pensar lo que durará en la mente de un niño cualquier tontería de las que ve u oye en televisión. ¿Y qué? Eso digo yo, que estoy jubilado.

1 comentario:

santi dijo...

De un niño o de un adulto, Tomás. También se puede mirar por el lado positivo y esperar que se le quede algo de lo bueno que se ve en televisión. saludos.